La mordaza de la cual Carmen Aristeguí es víctima y que amortajan nuestros derechos humanos, es francamente un acto que atenta contra los derechos humanos de forma transversal, y queda expuesta la humillación a la cual la periodista fue sometida, si bien es derecho de cada persona ciudadana el pedir explicaciones de la salud del Presidente de la República, es responsabilidad del gobierno de hacer del conocimiento su postura ante estos hechos.
El gobierno federal falla gravemente en su postura y en la forma de cómo resolver la situación que enfrentan, el bombazo que perpetro en contra de la libertad de expresión es peor que la falta grave cometida por Fernández Noroña, diputado del PT, quien fuera el autor de la manta que da lugar a dicha noticia, y la cual fue repudiada por la gran mayoría de los mexicanos, a razón que éste violo la esfera de intimidad de una persona, y denostó su dignidad humana de Felipe Calderón como persona, debido a que como la misma Carmen Aristeguí, expuso es un supuesto y no una verdad, el enfurecimiento del gobierno federal fue como la envestida de un toro de lidia, el cual no vio quien se la hizo, sino quien se la paga, y este fue el caso de Aristeguí.
De nuevo hoy por hoy, nos damos cuenta del terrible problema que enfrenta la administración calderonista, la cual no ha acertado de forma efectiva y positiva ante los problemas que se le presentan y que en vez de hacer las cosas diferentes recurre al autoritarismo, en esta ocasión donde realmente se contaba con todos los elementos necesarios para evidenciar la guerra sucia y la falta de respeto por parte de un mal llamado grupo “de izquierda”, donde Calderón fue victima al verse atropellados sus derechos humanos y su privacidad, pudiendo haber realizado una contra ofensiva inteligente y bastante bien armada, donde tenía sin lugar a dudas, todas las de ganar, optó por ejercer la parte mas obscura del poder, callando una voz sin medir las repercusiones que tendría dicho acto, ahora desafortunadamente el efecto al mecanismo de protección a periodistas será sin duda en primer lugar a legitimidad del mismo, debido a que el mismo gobierno que genera el instrumento es el mismo que ataca a quien defiende paradoja absoluta.
Nos queda claro, que no dejaremos de ejercer nuestro derecho a la libre expresión de las ideas, ni de pedir cuentas al gobierno en cualquiera de sus niveles, sino por el contrario, hacer visible nuestro repudio ante estos actos que nos golpean a todas las personas, porque nos abofetea a nuestra dignidad colectiva como nación.
Ni un paso atrás en los derechos conquistados, evidenciemos nuestra indignación.
C.L. Rodolfo Vitela Melgar.
Por la conquista de nuestros derechos.
El gobierno federal falla gravemente en su postura y en la forma de cómo resolver la situación que enfrentan, el bombazo que perpetro en contra de la libertad de expresión es peor que la falta grave cometida por Fernández Noroña, diputado del PT, quien fuera el autor de la manta que da lugar a dicha noticia, y la cual fue repudiada por la gran mayoría de los mexicanos, a razón que éste violo la esfera de intimidad de una persona, y denostó su dignidad humana de Felipe Calderón como persona, debido a que como la misma Carmen Aristeguí, expuso es un supuesto y no una verdad, el enfurecimiento del gobierno federal fue como la envestida de un toro de lidia, el cual no vio quien se la hizo, sino quien se la paga, y este fue el caso de Aristeguí.
De nuevo hoy por hoy, nos damos cuenta del terrible problema que enfrenta la administración calderonista, la cual no ha acertado de forma efectiva y positiva ante los problemas que se le presentan y que en vez de hacer las cosas diferentes recurre al autoritarismo, en esta ocasión donde realmente se contaba con todos los elementos necesarios para evidenciar la guerra sucia y la falta de respeto por parte de un mal llamado grupo “de izquierda”, donde Calderón fue victima al verse atropellados sus derechos humanos y su privacidad, pudiendo haber realizado una contra ofensiva inteligente y bastante bien armada, donde tenía sin lugar a dudas, todas las de ganar, optó por ejercer la parte mas obscura del poder, callando una voz sin medir las repercusiones que tendría dicho acto, ahora desafortunadamente el efecto al mecanismo de protección a periodistas será sin duda en primer lugar a legitimidad del mismo, debido a que el mismo gobierno que genera el instrumento es el mismo que ataca a quien defiende paradoja absoluta.
Nos queda claro, que no dejaremos de ejercer nuestro derecho a la libre expresión de las ideas, ni de pedir cuentas al gobierno en cualquiera de sus niveles, sino por el contrario, hacer visible nuestro repudio ante estos actos que nos golpean a todas las personas, porque nos abofetea a nuestra dignidad colectiva como nación.
Ni un paso atrás en los derechos conquistados, evidenciemos nuestra indignación.
C.L. Rodolfo Vitela Melgar.
Por la conquista de nuestros derechos.
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