La Federación debe combatir el abuso sexual de niños con severos castigos

Blanca Estela Botello
Nacional

Es indispensable que la Federación enfrente los problemas de abuso sexual infantil y los haga de su competencia, a través de mecanismos legales que cancelen esas prácticas e implemente severos castigos, señaló el diputado pevemista Pablo Escudero Morales.

El abuso sexual infantil, dijo, representa un problema social y de salud, sobre todo porque los niños y adolescentes que son víctimas sufren efectos adversos en su desarrollo social y educativo.

Escudero Morales resaltó que el abuso sexual puede provocar en los menores de edad mayor susceptibilidad a sufrir problemas sociales, emocionales y cognitivos durante la vida y a presentar comportamientos perjudiciales para la salud, como el abuso de sustancias adictivas o la iniciación precoz en la actividad sexual.

Refirió que, de acuerdo con datos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), de enero a junio de 2009 están en ejecución mil 249 averiguaciones previas por delitos de abuso sexual infantil, esto es un promedio diario de 6.9 expedientes.

Además, según refiere el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral para la Familia (SNDIF), durante 2008 entre 30 y 60 mil menores fueron víctimas de este delito.

“Es necesario actuar desde el ámbito legislativo porque, a pesar del marco normativo nacional e internacional vigente, la niñez en México sigue expuesta a agresiones que atentan contra su integridad”, expresó.

Con el propósito de proteger a los más de treinta millones de niños que residen en el país “y superar las dificultades que los gobiernos locales enfrentan para diseñar y ejecutar acciones efectivas en materia de combate al índice delictivo de abuso sexual de menores de dieciocho años”, el diputado propuso reformar los artículos 19 y 73 de la Constitución Política, 261 y 366 Ter del Código Penal Federal y 194 del Código Federal de Procedimientos Penales, en materia de abuso sexual de menores de dieciocho años.

Añadió que las modificaciones pretenden aumentar la punibilidad de los delitos de abuso sexual de menores de 18 años o de personas que no tengan capacidad de comprender el significado del hecho.

“El aumento de la punibilidad resulta necesario si consideramos que el abuso sexual de menores es una forma de maltrato que atenta directamente contra los derechos de los niños, afectando notablemente a la sociedad en uno de sus eslabones más importantes, pues vulnera su normal desarrollo y salud”, expresó.
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