jueves, 16 de julio de 2020

CARTA ABIERTA CASO DE MOBBING


Ciudad de México, México, 16 de julio de 2020.


“Nunca seas maltratado en el silencio. Nunca te permitas a ti mismo ser una víctima. No aceptes que nadie defina tu vida, defínete a ti mismo” Tim Field


DRA. CLAUDIA SHEINBAUM PARDO
JEFA DE GOBIERNO
CIUDAD DE MÉXICO
P R E S E N T E

Agradeciéndole de antemano la atención prestada.

Por medio de la presente permítame externarle la profunda preocupación que me lleva a dirigirme a Usted, toda vez que existen prácticas de abuso de poder que violan los derechos humanos de las personas que colaboran en este nuevo proyecto gubernamental, acciones que se niegan a morir en los proyectos democráticos de izquierda.

Hace poco más de dos años, elegimos un cambio ante el cansancio y el hartazgo de los excesos y malas gestiones de la clase política que le antecede. Conductas que llevaron a un rompimiento entre la población y la clase gobernante. Entre estos excesos se encuentra la asimetría del poder y su mal ejercicio; así pues los malos tratos, la crueldad, el acoso y la violencia laboral, la falta de respeto a descanso, a la seguridad social entre otros derechos humanos violentados, por jefes que se conducen con soberbia y altanería, fueron practicas (muchas) realizadas que hoy al parecer se reproducen en su gobierno. Al mismo tiempo, que regresan las peroratas de alarde y presumir el amiguismos o compadrazgos que se utilizaban para legitimizar la designación de titulares de secretarias y subsecretarias, unidades administrativas entre otros cargos de alta jerarquía, ante la falta de trayectorias contundentes, de conocimiento técnico y gestión probada.

Bajo este tenor, las pocas víctimas de la violencia laboral sufrida, pocas veces son conocidas públicamente, ante el miedo, el pánico de las cobardes amenazas que reciben por la crueldad de jefes abusadores, acosadores y violentos que gozan del sometimiento de sus colaboradores, tal cual fueran aristócratas con sus esclavos, estas víctimas son las que deberían estar sumamente protegidas y cobijadas ante la revelación de su estado de indefensión de quienes abusan de sus cargos.

El caso que hoy ocupa a quien suscribe es el de Fernando Torres quien público el pasado 6 de julio del año en curso, lo que vivía en su centro de trabajo, en donde fue vejado y discriminado por su forma de hablar, de vestir hasta su forma de comer, llegando a la violencia por obesidad, la cual no sufre. Fue humillado y amenazado por el influyentismo de su superior jerárquico, que hoy aun desconozco.

El hecho de salir de la oscuridad de la violencia por el “mobbing” o acoso laboral ampliamente estudiado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, comprendida como “la acción verbal o psicológica de índole sistemática, repetida o persistente por la que, en el lugar de trabajo o en conexión con el trabajo, una persona o un grupo de personas hiere a una víctima, la humilla, ofende o amedrenta[1], que lastima profundamente la dignidad humana; son las que hoy se comienzan a visibilizar en su administración, el caso ha sido tan real que Fernando ha sufrido incluso ciberacoso por personal que aparentemente deben conocerle ya que hablan de él con mucha cercanía al grado de señalarle “que habla por celular constantemente”, cuando hoy en día es una práctica laboral cotidiana, este hecho de “troleo” es la evidencia que constituye efectivamente que lo expuesto por Fernando goza de veracidad, ya que incomodo a quien ha de ver sido su “jefe”.

No dudo de su compromiso con los derechos humanos, con el respeto irrestricto de la dignidad humana, ya que cuenta entre sus colaboradores a grandes promotores y defensores de los derechos humanos como Andrés Lajous Loeza, o la misma Secretaria de Gobierno Rosa Icela Rodríguez y su directora Adriana Contreras, quienes se conducen con gran ética y profesionalismo, pero sobre todo con amor y compromiso al servicio de esta Ciudad.

Por todo lo anterior, le solicito a Usted los buenos oficios para esclarecer estas graves violaciones a los derechos humanos, se apegue en la investigación a lo estipulado en el documento de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos antes mencionado, y sobre todo salvaguarde la integridad, física, mental y profesional de Fernando.

Quedo pendiente.

Con los atentos saludos.

Rodolfo Vitela Melgar.
Ciudadane libre.
Por la conquista de nuestros derechos.