miércoles, 7 de agosto de 2013

CARTA ABIERTA A VLADIMIR PUTIN POR CRÍMENES POR ODIOS HOMOFOBICOS

México D.F., a 07 de agosto de 2013.

VLADIMIR PUTIN
PRESIDENTE DE LA FEDERACIÓN RUSA
PRESENTE

Sirva la presente para hacer un enérgico llamado ante los hechos homofóbicos que su gobierno ha venido realizando, a partir del debate ante la aprobación de la ley que prohíbe la “propaganda de las relaciones sexuales no tradicionales” del pasado junio, en donde se suscitaron diferentes manifestaciones en contra del mismo proyecto por parte de defensoras y defensores de los derechos humanos e integrantes de la población Lésbica, Gay, Bisexual, Travestí, Transexual, Transgénero e Intersexual (LGBTTTI), y que fueron violentamente censurados, y que a raíz de dichos actos se ha venido realizando una cacería en contra de las personas disidentes sexuales de las relaciones tradicionales rusas, el caso de la denuncia de Valentin Degtyarev, activista de los derechos humanos, quien sigue de cerca las acciones de grupos neonazis rusos; que bajo la perorata moral del combate contra la pederastia, tienden trampas a homosexuales por medio del uso de internet, para luego ser emboscados y someterles al acoso, malos tratos crueles, degradantes y torturas. Sobre esta agresión Degtyarev ha aportado más información y datos, al difundir una fotografía de dos individuos que mantenían tomado por la cabeza a un joven puesto de rodillas y en ropa interior, cubierto de lo que parecía sangre, o su representación gráfica, y con un pene de plástico en las manos de manera intimidatoria. Junto al chico, apoyado en un mueble, un bate de béisbol, sugiriendo la violencia corporal. Los dos agresores posaban sonriendo ante la cámara, mostrando a la persona como un trofeo de caza.

Estas acciones de persecución, estigmatización, discriminación, tortura y exterminio de la población LGBTTTI, por parte de la población rusa, son el resultado de las políticas públicas que forman parte de una campaña para promover los valores tradicionales rusos en lugar del liberalismo occidental, gestado y apoyado por el Kremlin y la iglesia ortodoxa rusa, esto a consecuencia de la permeabilidad de la violencia desde las cúpulas políticas a las personas gobernadas, desatando todo acto de violencia encarnizada de persecución, fenómeno conocido como “circulo de la discriminación”, estos actos de gobierno que van desde emplear cuerpos policiacos antidisturbios, detenciones arbitrarias a personas activistas de los derechos de las personas homosexuales, tratos crueles e inhumanos, propinándoles golpizas por hombres enmascarados, hasta imponer elevadas multas que van desde 156 dólares a los individuos que infrinjan la ley, y de hasta 31 mil dólares a las empresas infractoras, incluso medios de comunicación, por difundir información sobre la comunidad gay entre menores de edad, o por realizar concentraciones de orgullo gay.

Estas acciones van en detrimento de la dignidad y del valor inherente a la persona humana consagrada en los derechos humanos que se deben de velar ante cualquier valor tradicional que vaya en contra de dicho principio, esta dignidad humana la portan tanto personas que practican relaciones sexuales tradicionales o no tradicionales, es un valor que no se encuentra a disposición de creencias, políticas y demás interpretaciones análogas, ya que los derechos humanos dan un carácter de inviolabilidad moralmente ordenada y legalmente garantizada de la persona y la indisponibilidad del modo natural de su encarnación corporal de conformidad al libre desarrollo de la personalidad y del potencial humano, así mismo se violan los derechos a la libertad de expresión de la población LGBTTTI, el derecho a la libre asociación de las personas LGBTTTI, rompe la cláusulas de no discriminación e igualdad sustantiva y efectiva de los derechos humanos, así como la violación al  artículo 5° de la Declaración Universal de los Derechos Humanos la cual señala que: "Nadie será sujeto a tortura o a cualquier otro tratamiento degradante, inhumano o castigo”, dando paso a la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes no solamente especifica que los Estados signatarios prohibirán la tortura en sus legislaciones nacionales, sino que vas más haya  denotando explícitamente que no existe una orden superior o circunstancia excepcional para invocar la justificación de los actos de tortura como es el caso de perpetuar en Rusia la visión nociva de la homosexualidad; inclusive los realizados por miembros de la sociedad en aras por defender “valores tradicionales” y que son tolerados por los gobiernos contraviniendo las disposiciones de los tratados internaciones en derechos humanos.

Por lo anterior expuesto, se le solicita reencamine la visión esperanzadora de los derechos humanos de las personas de la población LGBTTTI, frenando estas medidas públicas atávicas de manera inmediata, que actualmente generan una dinámica de odio y persecución social que puede llegar a consecuencias genocidas y la destrucción del tejido social ruso. Asimismo, la inminente elaboración y ejecución de programas de restitución de daños, sensibilización y acciones afirmativas encaminadas a la igualdad sustantiva entre personas heterosexuales y homosexuales.

Con los atentos saludos.

Ciudadano Libre
Rodolfo Vitela Melgar
Por la conquista de nuestros derechos.


No hay comentarios.: