México D.F., a 04 de octubre de 2013.
SR.
THORBJØRN JAGLAND
PRESIDENTE DEL COMITÉ NORUEGO DEL
NOBEL
PRESENTE
Sirva
la presente para contribuir con los esfuerzos globales en construir un mundo
mejor, y reconocer la notable trayectoria de las personas que integran el
Honorable Comité Noruego del Nobel, quienes continúan respetando la solidaria y
noble naturaleza del otorgamiento de la presea más importante de la humanidad,
con fundamento en el legado testamentario de Alfred Nobel de Will, que
establece la calidad humana de la persona que haya de recibir tan distinguido
reconocimiento, como aquellas que” han aportado el mayor beneficio a la
humanidad” en relación directa a su labor “por la fraternidad entre las
naciones y la abolición o reducción de los ejércitos permanentes y la formación
y difusión de congresos por la paz”. Esta paz que se tiene como el mejor
estatus para el desarrollo humano, así como medio para alcanzar el mayor
potencial de la humanidad misma, como edificante en la construcción de una
sociedad respetuosa, armónica y fraterna ante la otredad entre naciones.
Por
lo anterior, y a razón de las aportaciones que generan el mayor beneficio a la
humanidad es que hablamos de la calidad en la protección irrestricta de la
dignidad de las personas; personas todas con las mismas necesidades pero con
menor o mayor grado de elementos e instrumentos para su satisfacción en
correspondencia directa al acceso material de los medios óptimos para su
realización. Accesibilidad que no es para todas los seres humanos por parejo,
sino que se conceden de forma desigual y discriminadora de conformidad a los
intereses de grupo, que lejos incumben al desarrollo humano de sus propias
naciones y menos al abono fraterno entre naciones, sino que responden a poderes
sectarios que les proveen de recursos en un reenvío perverso de empoderamiento
violentando el valor de los seres humanos, es por ello que hablamos de un
mínimo estándar en las labores que las personas candaditas al reconocimiento
realizan en aras de buscar y construir esta paz, lo que hace obligatorio el
hecho de revisar cada uno de los actos que realizan en lo particular y en lo
general para conseguir tan preciado fin, la congruencia en su actuar es lo que
les brinda la legitimidad ética de ser reconocibles, ya que se convierten en
una voz audible y honesta de aquellas personas que no la tienen.
Este
estándar mínimo necesario a cumplir por las personas candidatas que buscan la
armonía entre las naciones, naciones compuestas por personas, se deben a las acciones directas para proteger la dignidad
humana; así entonces se pueden encontrar en la Declaración Universal de los
Derechos Humanos el punto referencial, documento generalmente aceptado por las
naciones, dotando de contenido a la paz misma.
Es
por todo lo expuesto, exteriorizar la preocupación de quien suscribe ante la
posible candidatura del Presidente de la Federación Rusa, Sr. Vladimir Pútin,
quien ha venido realizando actos que violan la dignidad de las personas, socavando
sus libertades y acciones pacíficas para mejorar el mundo, utilizando discursos
de odio como aquellos que se pronunciaron antecesores del holocausto; por un
lado los hechos homofóbicos que el gobierno de Rusia, a partir del debate de la
aprobación de la ley que prohíbe la “propaganda de las relaciones sexuales no
tradicionales” del pasado junio, en donde se suscitaron diferentes
manifestaciones en contra del mismo proyecto por parte de defensoras y
defensores de los derechos humanos e integrantes de la población Lésbica, Gay,
Bisexual, Travestí, Transexual, Transgénero e Intersexual (LGBTTTI), y que fueron
violentamente censurados, y que a raíz de dichos actos se ha venido realizando
una cacería en contra de las personas disidentes sexuales de las relaciones
tradicionales rusas, el caso de la denuncia de Valentin Degtyarev, activista de
los derechos humanos, quien sigue de cerca las acciones de grupos neonazis
rusos; que bajo la perorata moral del combate contra la pederastia, tienden
trampas a homosexuales por medio del uso de internet, para luego ser emboscados
y someterles al acoso, malos tratos crueles, degradantes y torturas. Sobre esta
agresión Degtyarev ha aportado más información y datos, al difundir una
fotografía de dos individuos que mantenían tomado por la cabeza a un joven
puesto de rodillas y en ropa interior, cubierto de lo que parecía sangre, o su
representación gráfica, y con un pene de plástico en las manos de manera
intimidatoria. Junto al chico, apoyado en un mueble, un bate de béisbol,
sugiriendo la violencia corporal. Los dos agresores posaban sonriendo ante la
cámara, mostrando a la persona como un trofeo de caza.
Estas
acciones de persecución, estigmatización, discriminación, tortura y exterminio de
la población LGBTTTI, por parte de la población rusa, son el resultado de las
políticas públicas que forman parte de
una campaña para promover los valores tradicionales rusos en lugar del
liberalismo occidental, gestado y apoyado por el Kremlin y la iglesia
ortodoxa rusa, esto a consecuencia de la permeabilidad de la violencia desde
las cúpulas políticas a las personas gobernadas, desatando todo acto de violencia
encarnizada de persecución, fenómeno conocido como “espiral de la
discriminación”, estos actos de gobierno que van desde emplear cuerpos
policiacos antidisturbios, detenciones arbitrarias a personas activistas de los
derechos de las personas homosexuales, tratos crueles e inhumanos,
propinándoles golpizas por hombres enmascarados, hasta imponer elevadas multas que
van desde 156 dólares a los individuos que infrinjan la ley, y de hasta 31 mil
dólares a las empresas infractoras, incluso medios de comunicación, por
difundir información sobre la comunidad gay entre menores de edad, o por realizar
concentraciones de orgullo gay.
Actos
que van en detrimento de la dignidad y del valor inherente a la persona humana
consagrada en los derechos humanos que se deben de velar ante cualquier valor
tradicional que vaya en contra de dicho principio, esta dignidad humana la
portan tanto personas que practican relaciones sexuales tradicionales o no
tradicionales, es un valor que no se encuentra a disposición de creencias,
políticas y demás interpretaciones análogas, ya que los derechos humanos dan un
carácter de inviolabilidad moralmente ordenada y legalmente garantizada de la
persona y la indisponibilidad del modo natural de su encarnación corporal de
conformidad al libre desarrollo de la personalidad y del potencial humano, así
mismo se violan los derechos a la libertad de expresión de la población
LGBTTTI, el derecho a la libre asociación de las personas LGBTTTI, rompe la
cláusulas de no discriminación e igualdad sustantiva y efectiva de los derechos
humanos, así como la violación al artículo
5° de la Declaración Universal de los Derechos Humanos la cual señala que: "Nadie
será sujeto a tortura o a cualquier otro tratamiento degradante, inhumano o
castigo”, dando paso a la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas
Crueles, Inhumanos o Degradantes no solamente especifica que los Estados
signatarios prohibirán la tortura en sus legislaciones nacionales, sino que vas
más haya denotando explícitamente que no
existe una orden superior o circunstancia excepcional para invocar la
justificación de los actos de tortura como es el caso de perpetuar en Rusia la
visión nociva de la homosexualidad; inclusive los realizados por miembros de la
sociedad en aras por defender “valores tradicionales” y que son tolerados por
los gobiernos contraviniendo las disposiciones de los tratados internaciones en
derechos humanos. También las manifestaciones por activistas que protegen el
medio ambiente y su posterior encarcelamiento son parte de la misma violencia
del Sr. Putin y su gobierno, por lo todo lo expuesto, se le solicita la
revisión minuciosa de dicha candidatura, ya que no cumple con el fin último de la
prevalencia por la paz.
Con
los atentos saludos.
Ciudadano
Libre
Rodolfo
Vitela Melgar
Por
la conquista de nuestros derechos.
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