Reclama derechos comunidad sorda
Realizan especialistas foro en San Lázaro; respalda la CNDH quejas de asistentesEduardo Portas (7 julio 2007).- Érika Arias está cansada de tanto discurso. Está harta de que las autoridades no le hagan caso y de que no se respeten los derechos humanos de la comunidad de sordos en México."No nos hacen caso. Ya no cansamos de tener paciencia. Hacen juntas, reuniones, pero no hay nada para nosotros", dice a través de la intérprete Silvia Ortega durante el Foro "Avances y Retos de la Comunidad Sorda en México", que finalizó ayer en San Lázaro.
Érika, como otros 10 millones de personas en México, tiene un problema de audición del que se percató desde los 10 años. Tiene 32 años, vino desde Centro al Palacio Legislativo, y es madre soltera de un niño de un año y medio.Su experiencia la hace dudar del respeto de los derechos humanos en México."Yo tengo familia, tengo un niño y no encuentro trabajo fácilmente. Sufro mucho porque no hay trabajo", gesticula mediante el lenguaje de señas."Sólo dicen 'luego te hablo', 'luego te aviso' y nada. Estoy en mi casa. La verdad es que los derechos humanos no se respetan", acusa.Relata que tiene estudios avanzados y que les gustaría mucho ser maestra para niños sordos, pues ya les está dando clases particulares de manera voluntaria."Tengo muchos deseos de apoyar a los sordos porque yo lo siento en carne propia, ¿por qué no me dan una plaza de trabajo?", cuestiona.
Javier Moctezuma Barragán, secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), no tuvo más que reconocer que los reclamos de unos 100 asistentes del foro eran justificados."Hay una deuda indudable con la comunidad sorda mexicana", dijo en entrevista posterior al foro organizado por la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables de la Cámara baja."No ha habido un avance en cuanto a la atención que merecen por parte del Gobierno no obstante que ya hay disposiciones legales, como la Ley para Personas con discapacidad, que no está reglamentada."La comunidad tiene razón en denunciar en que por parte de la autoridad ha habido acercamientos, pero no ha habido hechos concretos", agregó el funcionario.
Observó que cuando 20 países ratifiquen la Convención de las Personas con Discapacidad, de la ONU, habrá un mejor marco legal.La Convención fue firmada en diciembre de 2006 y desde el 30 de marzo se abrió el periodo de firmas para países interesados en ratificarla. Una vez ratificada pasaría al Senado para que entre en vigor en México."Los sordos son una población marginada que sufre una de las discapacidades más lamentables"; debemos saber atenderlos y escucharlos. Es un derecho, no una dádiva", estableció.A su juicio, hay tres acciones específicas de la CNDH hace para mejorar la condición de las personas con discapacidad: a futuro, monitorear el cumplimiento de la Convención, cartillas que auxilian a las personas con esta capacidad, y atender sus quejas.Dijo que en México las instituciones no cumplen eficazmente la protección de los derechos humanos de las personas con discapacidad.En la mesa de Barragán participaron Esperanza Morelos, diputada federal panista y presidenta de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables; Ricardo Bucio, secretario técnico de la Comisión de Derechos Humanos del DF, y Manuel Márquez, presidente de la Confederación Nacional de Personas Sordomudas.
Nota Grupo Reforma
sábado, 7 de julio de 2007
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