REFLEXIONES Y RECUERDOS

EN PROFUNDIS.

Los acontecimientos de violencia acaecidos a últimas fechas al Cardenal Norberto Rivera Carrera, son lamentables y condenables, la violencia no genera riqueza ideológica para la democracia, pero en un acto de profunda reflexión, es necesario sociológicamente entender lo que sucede, ya que lo anterior es solo el reflejo de los sentimientos heridos de la nación ante la impotencia de aquellos que abusan y pasan sobre la Ley misma, y que al ser denunciados en sus actos ilegítimos se actúa de manera impunemente por parte de las autoridades ante dichos hechos, ya que profanan la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, de frente a estas demandas un gobierno de derecha la cual pone en la Secretaria de Gobernación a una persona de orígenes fundamentalistas y dogmáticos, se presume sea parte del Yunque, visiblemente sesgada su actuación cargada a lo clerical fuente de su falta completa de acción ante las denuncias de la intervención de la Iglesia Católica Mexicana en temas que solo atañen al México Laico, ante dicho agravio perpetrado por su inutilidad de parte de gobernación la cual lacera la dignidad de las victimas de los cultos a grupos socialmente marginados donde se vulneran los derechos humanos y humanas, sino por el contrario da dinero a manos llenas para que se realicen los trabajos de la Conferencia Episcopal realizada en este año.

Es necesario recordar con profundo dolor, toda la sangre que se ha derramado en aras de un México libre de pensamientos y creencias basadas en los cultos religiosos, desde aquí el mas profundo repudio también a nuestro H. Secretario de Gobernación Francisco Ramírez Acuña por su falta de compromiso con la patria, esta que le da de comer y de bien vivir.

Por otra parte también asalta la duda, solo queda traer a la memoria los actos perpetrados por el Yunque y los Tecos haya por los 50´s y 60´s, dichos grupos fundamentalistas de ultra derecha, fascistas y nazis, que combatían la proliferación del comunismo en México, al grado de atentar en templos de culto católicos para sembrárselos a los estudiantes y grupos de izquierda, también llama la atención la posición del Cardenal Rivera y sus allegados de ponerse con su carita de yo no hice nada, clásica actitud de “avienta la piedra y esconde la mano”, sobre todo en tiempos puntuales donde se debate las reformas al Estado y donde los cleros tienen puntual interés para que estos regresen al poder legítimo.

Resulta también irónicamente perverso que aquel que ha violado sistemáticamente la Ley se quiera acoger de ella en actitud beata, reminiscencias de su antecesor Monteagudo haya por los 1900 que hizo a traidores blandir su espada en aras de la Ley y la Justicia, espero no sea un nuevo Porfirio nuestro Señor secretario de gobernación.

Estos son solo algunos puntos de análisis a desarrollar, ahora veremos toda la fuerza que tiene la Iglesia para que el gran coloso de gobernación se mueva por primera vez después de su lamentable actuación en los casos de Oaxaca con Ulises Ruiz y su ex gobernador Montiel ahora senador, el caso de Puebla y el Gober precioso contra Lidia Cacho, y las denuncias interpuestas por varias organizaciones y ciudadanos por la intervención de la Iglesia en la vida política de México, como lo son las recientes denuncias en Guerrero tras las declaraciones realizadas por el Obispo de Acapulco en contra de la Ley de Sociedades de Convivencia que debate aquel Estado mexicano o el realizado para la investigación de la asistencia del Secretario de Gobernación a la Conferencia Episcopal y el dinero proporcionado para dicho evento.

Queda así la duda perpetuo de la intervención de grupos fácticos por medio de funcionarios públicos fundamentalistas y poco éticos.

C.L Rodolfo Vitela Melgar.
Por la conquista de todos nuestros derechos.